Por Demetrio Tupac Yupanqui (periodista)
Con mucho respeto a las creencias y personas, ni el Espíritu Santo, ni la Pacha Mama enseñan a escribir. Para escribir quechua, inglés, francés o castellano hay que estudiar. En esto no vale decir: “Soy cusqueño”, “ayacuchano”, “ancashino”, etc. Claro que hay cierto orgullo en cada quechua-hablante. Esto me sucedió cuando don Pedro Beltrán en 1950, me invitó a escribir sobre gramática quechua en el diario “La Prensa”.
Demetrio Tupac Yupanqui |
Me dije: Voy a restaurar la escritura cusqueña de la doble tt como ttanta (pan), de la doble “cc” como “Ccoscco” (Cusco) que había aprendido con brillantes oradores o predicadores del quechua, llamados “picos de oro”, en el Seminario de San Antonio Abad del Cusco. Cuando era periodista en “La Prensa” concluía la doctoral de Filosofía en la Católica y estudiaba Derecho en San Marcos. Y me dije: Un filósofo debe “pensar y buscar la verdad”. Eran los años del “Instituto Lingüístico de Verano” que hablaban de linguística y analizaban los idiomas de nuestro país. Le consulté al director del Instituto Lingüístico si podían enseñarme la manera correcta de escribir quechua.
El gringo que me conocía por los artículos que escribía dijo que me enviaría a sus representantes. Y fueron dos: una dama y un varón, ellos me desasnaron en breve tiempo e inclusive me invitaron a Yarinacocha (Pucallpa) para ver los maravillosos registros de los casi 200 idiomas de nuestra selva y del quechua mismo. Dirán: ¿Cómo se escribió el quechua en los documentos españoles de la conquista y los concilios limenses? Pues mal. No había estudios ni enseñanza lingüística.
Inclusive hoy hay pocas personas que saben qué son bilabiales p, p’ y ph. Alveolares t, t’, th. Palatales ch, ch’, chh. Velares k, k’ y kh y Post-Velares q, q’ y qh. Y esto sin hablar de apus, hamawt’as, yachachih o del ch’ulla chaki. Ahora ya se conoce esta especialidad en nuestras universidades.
Otra cosa más. En Cornell University de Nueva York encontré maravillosos estudios sobre el quechua, aymara y otros idiomas nativos. Y su escritura es para no equivocarse. El japonés, el canadiense o el éuscaro lo leen con esa escritura al quechua como si fueran de Apurimac, Cusco o Ayacucho. Igual a quienes leyendo las notas en el pentagrama ejecutan huaynos puneños o huaracinos aunque no conozcan el Lago Titicaca o el Callejón de Huaylas.
Si queremos que nuestro idioma avance aprendamos a escribir. A hablar nadie nos va a enseñar a los nativos pues eso nos viene de nuestra propia cultura. Para escribir hay que ir a centros especializados. El castellano lo siguen escribiendo mal muchos doctores o calificados con otros títulos, pese a la que nos lo enseñaron muchos años en la primaria, secundaria y universidad.
Una confesión más: toda la vida he difundido el quechua por diarios, TV, radios e Internet. Lo he hecho casi por todos los países de América y Europa invitado por organizaciones de cultura. No he ganado nada pero estaría feliz que los quechuahablantes de América despertaran y estudiaran.
No queda nada claro qué es eso de "escribir bien el quechua". Quién o qué organismo podrá decir lo que es "escribir bien" pues lo que tenemos son distintas formas de escribir según la variante del escritor y según su experiencia. No entiendo qué es "el quechua" pues existen distintas hablas en casi 5 países que es un engaño hablar de "el quechua". Estamos recién conociendo las distintas "lenguas quechuas" y seamos cautos. Hablo una variante de quechua desde que nací y tengo todavía dificultades para entenderme oralmente y por escrito con otros hablantes de otras zonas. Mientras alguien diga que habla o escribe el "quechua correcto" estamos en problemas. Ni mencionar ciertos regionalismos funestos. Saludos de Fernando Antonio
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