Por Grace Gálvez Núñez
El destacado lingüista Ignacio Bosque visitó Lima para realizar tres conferencias magistrales los días 20, 21 y 22 de setiembre: «Preposiciones e intervalos temporales», «Tradición y novedad en la nueva gramática académica» y «Los diccionarios combinatorios», respectivamente.
Tuve la suerte de asistir a la última conferencia y me llevé una gran sorpresa: Ignacio Bosque llegó para presentarnos a la lexicología combinatoria, a través de dos diccionarios cuya elaboración él dirigió: Diccionario combinatorio PRÁCTICO del español contemporáneo (que llegará pronto a Perú) y REDES (ya está en Lima).
Se trata de diccionarios que abordan información combinatoria de naturaleza semántica. Las entradas que se presentan aquí no tienen acepciones, sino pistas de sentido. Bosque explicó que nosotros usamos metáforas todo el tiempo y siempre estamos combinando las palabras de determinada manera con determinadas palabras. Por ejemplo, siempre decimos «atravesar crisis», porque las crisis se atraviesan.
A continuación les mostraré imágenes de las diapositivas que Bosque presentó con algunas entradas del diccionario PRÁCTICO (nombres, verbos, adjetivos y adverbios) para que lo vean ustedes mismos:
Asimismo, el lingüista pidió a todos los investigadores que continuemos con estos estudios y que intentemos desarrollar diccionarios similares, con la finalidad de completar la información puesto que se trata de 1500 entradas aproximadamente y sin duda faltan muchas más.
Finalmente, estas son las conclusiones que presentó Ignacio Bosque «Consecuencias, desarrollos y perspectivas»:
1. Las entradas de listas de los diccionarios combinatorios habituales pueden ser construidas por programas informáticos a partir de la información proporcionada en las entradas analíticas, no al revés.
2. La combinatoria léxica restrictiva nos ayuda a establecer clases significativas propiamente lingüísticas.
En REDES…
- Las dudas se agrupan con las nubes y con los rumores porque se disipan.
- Los planes, la vida, los destinos y los viajes se agrupan con los caminos porque se tuercen.
- Los gobiernos, los sistemas y las teorías se agrupan con los edificios o los monumentos porque se derrumban.
Quizá estudiar, analizar, investigar o interesarse expresan lingüísticamente «movimiento hacia el interior de algo», puesto que admiten profundamente, como adentrarse, calar, penetrar o respirar.
Las combinaciones más frecuentes en REDES expresan informaciones redundantes. Constituyen una especie de epítetos no literarios.
En la combinatoria léxica intervienen:
- Variables semánticas que restringen la relación predicado-argumento.
- Clases semánticas no siempre tradicionales que permiten agrupar las palabras en haces conceptuales sumamente diversos.
- Lugares comunes, tópicos y otras informaciones acuñadas y heredadas.
Hacen falta más trabajos que nos ayuden a entender y a distinguir mejor todas estas informaciones.
Entrevista a Ignacio Bosque
¿Qué le ha parecido la recepción de los estudiantes de Lingüística?
Estoy encantado. La recepción ha sido espectacular, ha habido mucho interés por las charlas y ojalá hubiera podido quedarme más tiempo, pero habrá otra ocasión.
¿Cómo se interesó por la lexicografía, siendo usted un gramático?
A mí me interesa la lexicografía de este tipo. Algunos amigos dicen que esto es gramática disfrazada y a lo mejor es cierto, es posible que esto sea gramática disfrazada de lexicografía. La verdad es que se trata de una parte de la lexicografía más vinculada con la gramática, por eso me ocupo de ella. Si fuese léxico independiente de la sintaxis, yo no lo estudiaría porque me considero gramático.
¿Cómo surgió esta idea de realizar un diccionario combinatorio?
Yo pienso en estas cosas desde hace 30 años más o menos, considerando que las palabras se combinan de manera más restrictiva de lo que pensamos. Al hablante, la lengua le sale sola: como camina de manera automática o como respira. Pensamos que detrás o debajo de esos procesos existen mecanismos muy complicados. Lo mismo ocurre con las palabras, combinamos procesos de manera automática, así como caminamos de manera automática; sin embargo, hay ciertos detalles como restricciones y sistemas y principios. La lingüística es eso en buena medida.
¿Hay algún proyecto para desarrollar diccionarios similares en español?
Mío no, ojalá hubiera de otros. Yo por el momento me enfoco en la Complutense, a dar clases de sintaxis y es posible que deje esta rama de la lexicología porque no se pueden trabajar en muchos campos a la vez.
Este fue un proyecto interesante del que me ocupé intensamente desde hace cuatro o cinco años, pero reuní información de hace 30 años, dándole vueltas, pensando, tomando notas, leyendo. Cuatro años es muy poco, pero cuando empezamos, ya tenía mucha información acumulada y la cuestión es trabajar con cierto orden.
¿Está realizando algún otro proyecto actualmente?
El de jubilarme (risas). En la Complutense tenemos un plan de prejubilación en el que uno puede escoger sus horarios de manera electiva, para dar menos clases progresivamente según avancen los años y disminuyen las fuerzas.
Habiendo terminado la coordinación de la Gramática de la Academia (Nueva gramática de la lengua española), ahora vuelvo a trabajar, sobre todo a dar clases en la Complutense. Ahora trabajo en proyectos más pequeños, pero ninguno de la envergadura de estos proyectos.
La Gramática que hicimos con Violeta Demonte eran tres volúmenes y fueron cuatro o cinco años de trabajo intensivo. Ahora quiero hacer cosas más chicas.